Ella intentaba coger
La blanca flor
Del cerezo en primavera
Subió al árbol
A orillas del río
La rama bajo ella
Se rompió con un chasquido
Y la joven muchacha
Se precipitó al agua
Con sus dulces flores
Envolviendo su cuerpo
El río se la llevó
Como hace con todo
Para dejar fluir
Esa agua que lleva
Hasta la misma orilla
Del vasto mar infinito
La doncella no se resistió
Y cayó dormida
Para no despertar
Nunca jamás
Pues ahora podría
Al fin de tanto
Reencontrarse con aquel
Que tanto amó
Y que se fue
Como el agua que
Ahora se la llevaba