¿Cuánto tiempo a que te perdiste a ti misma?
¿Cuánto tiempo que dejaste a un lado tu ser para ser otra?
¿Dónde está la niña que no tenía vergüenza?
Tan pronto bailabas,
Tan pronto decías disparates,
Sentías más que pensabas
No creías en un mal tan cerca, contigo,
Eras una Peter Pan,
Viviendo en un eterno Nunca Jamás,
No querías crecer,
Querías jugar, soñar…
¿En qué momento te olvidaste de vivir?
¿Dónde se quedó tu esencia?
Déjame ir a buscarla
Y devolverte tu verdad,
Déjalo todo, tus planes, tus preocupaciones,
Apaga el ordenador,
Camina, corre, ve mundo,
Y si en el transcurso encuentras la felicidad,
No la dejes ir,
Pero no la encontrarás jamás,
En el mundo que ahora ves,

Recuerdo que un día viste la verdad,
Sin magia, sin príncipes ni hadas,
Y tú no eras ninguna princesa,
El mal campaba por doquier,
Y tergiversaba todo,
Envenenaba y destruía la inocencia,
O eras una niña,
O una burda imitación adulta,
De pronto se produjo el salto,
Y no te quisiste dar cuenta,
Te retrajiste en ti misma,
Guardaste todo para ti,
Incluso tus lágrimas y tú sentir,
Aprendiste a estar sola,
A convivir con la soledad
Y cuando el mundo te asusta,
Ahora huyes
Te vas lejos, renegando de todo,
Con razón o no,
Aprendiste la lección
Nada de cuentos ni ficción
Más allá del papel o televisión
Desarrollaste cierta apatía
Que nadie llegó a entender
Y a pesar de todo
Sigues sin alcanzar la comprensión
Del mundo la realidad
Eres extraña, ajena a casi todo,
Casi una máquina, un robot,
Con tintes infantiles
Sombras de lo que perdiste
Ayúdame a buscar tu alma,
Perdida en las brumas del tiempo
Recupera tu vida y ese tiempo perdido
O pronto llegará el día
En que nada ya sirva
Y no seas más que polvo
Que vuela con el viento
Y te deje muerta en vida
Sin ilusión, sin sentir,