
Un mapa indica la ubicación de los diferentes lugares. Una brújula te indica si vas en la dirección correcta para llegar a un lugar en concreto.
Si estás perdida ambos te pueden ayudar a encontrar el camino correcto. Más solo tendrán sentido si sabes cual es tu destino.
Cuando no sepas a donde vas, ni qué dirección tomar, no temas. No busques un mapa o una brújula, pues solo te liarán más. Escucha a tu corazón, es el único que sabe a dónde quiere llegar y encontrará siempre un camino que te lleve a él. En su interior, tu corazón tiene grabado el mapa con la ruta a seguir. Es un mapa que te ocultará hasta que sienta que estás preparado para conocerlo. No dudes nunca de tu corazón y sus designios. Él siempre sabe qué es lo mejor para ti.