
La ciudad se prepara para la batalla final, la única que decidirá quién es el vencedor. Sus ciudadanos hacen con las armas que les permitirán sobrevivir en el campo de batalla y hacen acopio de la munición necesaria para atacar.
Los dos bandos se reúnen en el centro de la ciudad preparando la estrategia para atacar. Se distinguen por los colores de sus camisetas, rojas y amarillas… Pronto entrarán en combate. La tensión se palpa en sus plazas, sus armas están ansiosas por empezar a disparar. Los combatientes afinan su puntería al ritmo de la siniestra música de tambor y trompetas.
La marcha comienza, y los bandos salen a enfrentarse mientras los ciudadanos más temerosos se parapetan en sus casas, esperando que la contienda termine pronto y que las bajas no sean demasiado numerosas. En el centro de la ciudad, rojos y amarillos se encuentran llenos de odio hacia el bando contrario. Sus comandantes marcan el inicio de la batalla y los soldados salen llenos rabia a atacar.
Pronto el centro de la ciudad esta empapado por el agua de las pistolas que llevan los contendientes, por las municiones que se caen sin usar o por las granadas de agua que estallan contra los soldados. No ha ganadores ni vencidos, solo gente empapada de pies a cabeza y de fuera a dentro. Hasta los valientes perros que se han atrevido a acompañar a sus dueños echan agua por las orejas…
Por fortuna, la batalla ha si tenido lugar en un soleado y caluroso día de verano…
Escrito inspirado en la batalla anual de Canamunt y Canavall que se celebra cada año el primer domingo de septiembre en Palma de Mallorca. A continuación os paso unos enlaces de interés:
- Conocer historia – en catalán. Si te interesa y no sabes catalán, prueba con el traductor del navegador (ventajas de las nuevas tecnologías)
- Palma de Mallorca – conocer la ciudad – enlace en español